«La génesis de la palabra Quindío se halla entre las brumas del tiempo y de la historia».
El primero de julio se cumplió el quincuagésimo séptimo aniversario del Quindío como departamento, fecha en la que, en 1966, tomó posesión en la plazoleta del parque de los Fundadores su primer gobernador, Ancízar López López, ante el presidente Guillermo León Valencia, ocasión que quiero aprovechar para hacer algunas acotaciones sobre la palabra Quindío cuya génesis se halla entre las brumas del tiempo y de la historia.
Para algunos, el vocablo está relacionado con los quindos, una de las culturas precolombinas que habitaron la región, hipótesis que varios investigadores han puesto en duda por la poca evidencia arqueológica que lo corrobora. Otra versión es la del gobernador Roberto Jairo Jaramillo Cárdenas, que ha expresado en varias ocasiones que la palabra Quindío viene de quin que significa tierra, y dío que es dios; sin embargo, debo admitir que ignoro los fundamentos que tiene el mandatario de los quindianos para hacer esta afirmación.
Sobre el mismo asunto, el historiador Gonzalo Alberto Valencia Barrera (miembro de la AHQ) me suministró una valiosa información relacionada con el registro que de la palabra Quindío hicieron algunos cronistas de Indias durante la conquista del Nuevo Reino de Granada. El escribano Juan Bautista Sardella en Relación del descubrimiento de las provincias de Antiochia por Jorge Robledo (En: Salazar Santacoloma, Edgardo (Ed). IV centenario de la fundación de Santa Ana de los Caballeros de Anserma. Manizales: 1939, Imprenta del departamento de Caldas) señala que ya en 1540, cuando el capitán Jorge Robledo adelantó la exploración de la Provincia Quimbaya, hay antecedentes de la existencia del valle del Quindío tal como se lee a continuación:
«Y había algunos días que tenía noticia, por indios de un valle que se dice Arvi, ques de la otra banda de la cordillera de las sierras nevadas; e así mismo de otro valle, que se dice Quindío, que estaba cerca de aquella provincia de Quimbaya, que se contraba con Arvi. Y para descobrir el camino envió a Álvaro de Mendoza, con cierta gente de a pie a la lijera, porque no podían llevar caballos, el cual fue, y al cabo de ciertos días que de aquella cibdad (Cartago) partió, descubrió aquel valle de Quindío; y hallaron el camino tan áspero y fragoso, que en ninguna manera se podían meter caballos (Sic).»
Posteriormente, otros cronistas como Lucas Fernández
de Piedrahita en La historia general del Nuevo Reyno de Granada (Madrid:
1688, Antwerp, Verdussen) escribe lo siguiente:
«[...]
Enterada pues la gente de Robledo con la relación, que dio Suer de Naba de las
buenas calidades que avía reconocido en la Provincia para los interefes a que
miraban, refolvieron fundar una Villa en la parte llana, que media entre los
ríos Otún y Quindiu, que feparados a poca distancia corren a fertilizar la
Provincia, y llamáronla Cartago (Sic) […]»
Ya durante la colonia y en años subsiguientes, como lo expongo en el artículo El vocablo Quindío en la historia de Colombia, la palabra indígena Quindío aparece con frecuencia en los textos de viajeros que cruzaron sus tierras durante los siglos XVIII y XIX al nombrar la cordillera Central con los nombres de Andes del Quindío, Montañas del Quindío o Sierra Nevada del Quindío. Con el paso del tiempo, la región de la cuenca del río de la Vieja se llamó la provincia del Quindío, nombre que heredó el departamento que hoy lleva su nombre.
De otra parte, al indagar en el diccionario de
la Real Academia de la Lengua, que a lo largo de la historia ha recogido
numerosos vocablos de culturas precolombinas, encontré que quin viene
del quechua kiñu que es agujero, lo cual me recordó que el académico
Germán Medina Franco (miembro de la AHQ) planteó una interesante hipótesis
desde el punto de vista lingüístico sobre el origen del vocablo. En su artículo Reflexiones sobre el nombre del Quindío anota
que, a la luz de la gramática histórica, y a falta de un dictamen
concluyente entre los miembros de la comunidad académica acerca del origen de
esta palabra: «Quindío es un quechuísmo de los tiempos de la Conquista que
nació para denominar una región con abundancia y variedad de colibríes, […]. Quindío
es una voz mestiza […], pero sobre todo incaico. Voz de derivación mixta que
procede de la raíz quechua q’inti que significa colibrí (kindi en
sus variantes de los pueblos de la sierra ecuatoriana o quinde en los de
más al norte de los límites septentrionales
del antiguo Tahuantinsuyo donde conserva inalterable su significado) y
del sufijo español ío que procede del latin ius o ium, morfema de
valor y uso colectivo e intensivo con el cual se designa una cantidad imprecisa
de algo como en los vocablos caserío, rancherío y gentío que aluden en su orden
a pluralidad de casas, de ranchos y de gentes. Así las cosas, el término
Quindío debió brotar de la boca de los conquistadores españoles para
caracterizar a un territorio rico en kindis, es decir en colibríes […]».
En otro
artículo titulado Los yanaconas y el nombre del Quindío Medina Franco expone que el adelantado Sebastián de Belarcázar al
ingresar a lo que hoy es Colombia proveniente del Ecuador trajo consigo un
contingente de indios yanaconas quechuahablantes sustraídos del imperio inca y
puestos al servicio de sus tropas. Parte de ellos acompañaron a Jorge Robledo
en su exploración por el río Cauca y en las fundaciones de Anserma (1539) y
Cartago (1540). Fue así como «los yanaconas trajeron consigo su milenario
acervo cultural, su visión del mundo y la sonora expresión de su universo
simbólico a través del quechua […]. Algunas expresiones de esa lengua andina
penetraron desde entonces en el torrente circulatorio del castellano y han
logrado sobrevivir inalterables hasta nuestros días como huaca, tambo, chuspa,
chagra. Otras, a juicio nuestro, fueron enriquecidas a través del mestizaje
cultural y lingüístico como el vocablo quindi que significa colibrí y
derivó en Quindío en boca de los españoles para denotar cantidad y variedad de quindis
[…]». El autor señala en su texto que la expresión quinde aún hoy se
usa en Nariño, Cauca y Putumayo se para denominar al colibrí.
Hasta aquí
llego con estas anotaciones no concluyentes sobre el origen del vocablo
Quindío. Le corresponde al lector valorar la información y sacar sus
propias interpretaciones.
Armando Rodríguez Jaramillo
Correo: arjquindio@gmail.com / Twitter: @ArmandoQuindio / www.quindiopolis.co
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