En Armenia se extravió la cultura ciudadana


«Una ciudad con poca cultura cívica y limitado capital social es una ciudad que verá comprometido su futuro por andar extraviada en su presente».


Recientemente el Programa Armenia cómo vamos entregó la «Encuesta de percepción ciudadana 2023» realizada el año pasado por Yanhass, primera que se hace de forma presencial después de la pandemia. Recordemos que esta iniciativa hace parte de La Red Colombiana de Ciudades Cómo Vamos (RCCCV) que incluye a 41 municipios, 14 de ellos ciudades capitales, con el fin de generar información confiable, imparcial y comparable en torno a temas de calidad de vida urbana y participación ciudadana por lo que es un referente no gubernamental sobre información y análisis de políticas públicas.

La Red tiene el respaldo de socios nacionales como la Fundación Corona, El Tiempo y la universidad Javeriana, y como aliados locales el diario La Crónica, Edeq, Comfenalco, Cámara de Comercio y las universidades Alexander von Humboldt, Quindío y EAM.

Como su nombre lo indica, es una encuesta de percepción, término que expresa la acción de percibir que, según la RAE, es «captar por uno de los sentidos las imágenes, impresiones o sensaciones externas», por lo que sus resultados no se basan en estadísticas e indicadores (datos duros), si no que muestran cómo la gente ve y siente su ciudad (datos blandos), razón suficiente para no descalificarlos con percepciones diferentes.

Ante la imposibilidad de abordar en su totalidad los 21 puntos que la componen, me concentraré en aquellos relacionados con calidad de vida, seguridad, participación ciudadana, corresponsabilidad y cultura, pues de alguna forma conectan con ciudadanía, identidad y capital social.

 

Algunos resultados

Lo primero que quiero destacar es el clima de opinión donde el 63% de los encuestados señalaron que las cosas en Armenia van por mal camino, apreciación que contrasta con que el 58% dijo sentir orgullo por su ciudad y el 75% estar satisfechos con Armenia como sitio para vivir, respuestas que revelan aprecio y sentido de pertenencia, aunque para muchos las cosas vayan por mal camino.

Un aspecto que influye en el grado de satisfacción es la percepción de seguridad. El 64% de los consultados dijeron sentirse seguros en el barrio donde viven mientras que el 42% afirmaron sentirse seguros en la ciudad, al tiempo que señalaron a los atracos callejeros y a la drogadicción como los mayores problemas de seguridad. 

En relación con la participación ciudadana, el 87% de los encuestados manifestaron no haber realizado ninguna acción para intentar resolver problemas que los hayan afectado personalmente o a su comunidad, respuestas que reflejan un alto grado de individualismo e indiferencia. A esto se suma que el 82% respondió que no participa en ninguna organización como juntas de acción comunal, organizaciones religiosas, clubes y asociaciones culturales o deportivas, grupos ambientales, asociaciones de padres de familia y partidos o movimientos políticos. A pesar de este precario capital social, el 52% reconoce que es deber ciudadano el participar activamente, lo que sin duda constituye un buen punto de partida para incentivar la cooperación y colaboración ciudadana.

En cuanto a la corresponsabilidad o responsabilidad compartida, para el 57% de los ciudadanos la alcaldía, las juntas de acción comunal, el gobierno nacional, las iglesias, las empresas de servicios públicos, las universidades, la gobernación, la policía y los medios de comunicación no realizaron acciones conducentes a mejorar la calidad de vida en la ciudad, respuesta que debería motivar una profunda reflexión al interior de estas organizaciones sobre la forma en que son percibidas por la ciudadanía.

Siguiendo con la corresponsabilidad, entre el 47 y 60% de los encuestados consideraron que los habitantes se comportan mal con el respeto a la vida y a las normas ambientales y de tránsito, y con el cuidado y respeto de los espacios públicos (parques, zonas verdes) y bienes públicos (inmobiliario urbano). Cuando se les preguntó cómo se comportan los ciudadanos frente a las normas básicas de convivencia, entre un 41 y 51% respondieron que no hay respeto por las personas con discapacidad, por los niños y adultos mayores, por los migrantes y minorías étnicas, por los desplazados por la violencia y desmovilizados, por los que tienen diversas orientaciones sociales y por las mujeres, conductas que ponen en riesgo la convivencia y cohesión social.

Un aspecto crítico de la encuesta es la cultura, pues el 51% dijo no haber participado en actividades de este tipo durante el último año y solo el 32% y 38% respectivamente manifestaron estar satisfechos con la oferta cultural y la oferta recreativa y deportiva de la ciudad. Al indagar por las actividades deportivas y recreativas en que participaron, el 35% y 33% expresaron que visitan centros comerciales y restaurantes respectivamente, respuestas que deja mucho que pensar.

Por último, entre un 27 y 46% de los consultados mostraron insatisfacción con la calidad de los espacios públicos como parques, zonas verdes, andenes, plazas, escenarios deportivos, bici carriles y mobiliarios urbanos, resultados poco gratos si se considera que es en espacio público donde la gente se apropia de su ciudad.

 

Colofón  

 Conocer la percepción sobre el clima de opinión en Armenia y la calidad de vida, seguridad, participación ciudadana, responsabilidad compartida, cultura y espacio público es entender el espíritu y el compromiso de sus habitantes, es ahondar en su capacidad de articulación y también en su solidaridad y sentido de compasión, es sopesar el capital social y la facultad para actuar, es tomarle el pulso al civismo.

Una ciudad con poca cultura cívica y limitado capital social es una urbe desmemoriada con poca relación con su pasado y reducida consciencia de sí misma. Pero, ante todo, es una ciudad que verá comprometido su futuro por andar extraviada en su presente.

 

Armando Rodríguez Jaramillo

Correo: arjquindio@gmail.com  /  Twitter: @ArmandoQuindio  /  www.quindiopolis.co

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4 Comentarios

  1. Que buen comentario y clarito ...Dr Armando Rodriguez Jaramillo .....Ofelia Restrepo Botero

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    1. Gracias Ofelia Restrepo por su lectura y por el comentario.

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  2. Armenia es una ciudad pequeña, hermosa y fácil de administrar que está sometida a la voluntad de quienes se atornillan al poder alimentando sus egos y sus bolsillos siendo un pobre ejemplo de civismo y una clara muestra de cinismo y mezquindad. En Armenia sobrevivimos del rebusque porque sus dirigentes desestimulan sistemáticamente el crecimiento y desarrollo de la industria y ciegamente cierran espacios al verdadero emprendimiento limitándose a feriecitas intrascendentes que solo ayudan a maquillar las cifras de miseria mientras se hacen humo las ilusiones cuyabras.

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    1. Muchas gracias por sus opiniones que contribuyen a formar consciencia de lo somos.

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