Armando Rodríguez Jaramillo (Armenia - Quindío)
Durante los últimos años
el parque de Los Fundadores, construido en 1964 para el cumpleaños 75 de
Armenia, ha sufrido de abandono oficial encontrándose en estado deplorable sus
monumentos históricos y sus simbologías: la escultura a Los Fundadores del
maestro Roberto Henao Buriticá representada en el Troncho y el Hacha, el muro
con los nombres de la junta pobladora de Armenia, la placa a la ciudad hermana
de Columbia - Missouri, la placa al segundo centenario del nacimiento de
Antonio Nariño, el monumento a los 38 años del departamento, el mausoleo con
los restos de Jesús María Ocampo y su esposa Arsenia Cardona, el asta con la
bandera de Armenia y dos palmas de cera que nos recuerdan que son el Árbol
Nacional de Colombia.
Hay que recordar que el
parque y sus monumentos estuvieron en buen estado de conservación mientras la Sociedad de Mejoras Públicas se encargó de
ellos, pero con la decisión del alcalde Mario Londoño Arcila de quitarle el
cuidado de los parques a la Sociedad, vino su deterioro y abandono.
Baños públicos al lado del mausoleo de Jesús María Ocampo durante las fiestas Cuyabras organizadas por la Alcaldía de Armenia |
A esto se sumó que a las
administraciones municipales, en cabeza de la Corporación de Cultura y Turismo,
entidad que debía velar por la preservación de la cultura y el patrimonio de la
ciudad, se les ocurrió que las festividades de Armenia en cada octubre se
celebraran con eventos de mal gusto en medio del trago y el bullicio. Fue así
como se creyeron con el derecho de entregar en alquiler el parque de Los
Fundadores a empresarios de la cerveza para que instalaran casetas, tarimas,
expendios de licor y sanitarios públicos al lado de la tumba de Tigreros, el
fundador de la ciudad, ocupando la plazoleta donde se posesionó el primer
gobernador del Quindío el 1 de julio de 1966.
Ahora la administración Valencia
Franco se idea un proyecto de intervención y remodelación del parque de Los
Fundadores con el compromiso de no volver a alquilarlo a empresarios de la
rumba barata para que hagan allí de las suyas. Propósito que hay que reconocer
y apoyar, pero que también hay que analizar en su verdadero contexto para que no quede el
mensaje que ahora la alcaldía acude como la salvadora de Los Fundadores.
Lo primero que hay que
aclarar es que el deterioro del parque se debe al abandono al que lo sometió el
propio gobierno municipal, pues no es sino ver su pileta que no funciona hace
más de seis meses, sus zonas verdes son un desastres, la invasión del espacio
público por vendedores ambulantes se da por todos lados, los indigentes lo volvieron
su lugar dormitorio y los drogadictos su sitio de consumo, el alumbrado público
y el aseo es deficiente y la inseguridad evidente. Así que no basta con un acto
de contrición anunciando la recuperación del parque, es indispensable también un
verdadero compromiso con la ciudadanía para que se haga el mantenimiento que
merecen estos espacios públicos, pues de nada sirve remodelarlos si se dejan a
su suerte para que caigan nuevamente en el abandono en que están.
Y no es que sea
negativo, pero los ejemplos que en Armenia tenemos con la ineficiencia oficial
para conservar el espacio público y controlar su invasión son evidentes, basta
con observa el estado de la peatonal de la Calle Real y el de los andenes recientemente
construidos en el centro a través del Programa de ciudades Amables para tener
dudas sobre la real capacidad y voluntad política (¿?) de la alcaldía para
garantizarle a la sociedad el uso, disfrute y conservación del espacio público,
y sí que menos de los escasos monumentos con que cuenta la ciudad.
Otra reflexión por hacer,
es que proyectos como el de la remodelación de los parques deberían ser
pensados y formulados de cara a la opinión pública, donde el ciudadano y las
instituciones tengan la oportunidad de opinar, de esta manera se lograría una
mayor apropiación social y se podrían concebir proyectos más integrales, sobre
todo si estos tienen que ver con el patrimonio y la identidad de los pueblos,
cosa que no fue así con el proyecto que nos ocupa, pues se pretendía construir en
la plazoleta sur del parque módulos para la venta de comida y bebidas con
asientos, mesas y sombrillas con el fin de concesionarlos al estilo de los mall
de comidas de los centros comerciales.
Vista general de lo que se pretendía hacer con la plazoleta del parque de Los Fundadores convirtiendo el espacio público en un mall de comidas. |
Nota: Que lamentable
decisión la de remodelar el parque Cafetero ignorando que fue donado por el
Comité Departamental de Cafeteros del Quindío en honor al café y a los cultivadores
del grano. ¿Cómo decirle a los visitantes y a la Unesco que en tierras del
Paisaje Cultural Cafetero el único parque hecho en honor al café lo estamos
cambiando por otros usos?